Mercero es el director de esta cinta llena de sentimientos y de humor al mismo tiempo; humor si es que se puede hablar así cuando se cuentan las vivencias en un hospital de unos chavales de 14 de años que padecen cáncer. Producida por BocaBoca obtuvo premio al mejor director en el Festival de Cine de Montreal y premio del público en la Mostra de Cinema del Mediterrani de Valencia.
Albert Espinosa le ayuda al director en la elaboración del guión; el haber pasado por las experiencias que se cuentan en un film -Espinosa padeció cáncer a esa edad- siempre acerca mucho más la historia a uno mismo y por tanto aumenta la facilidad para transmitir emociones a los espectadores.
No es una película triste y desesperanzadora; al contrario está realizada en clave de relativo humor y sacando todo lo bueno de una situación así. De todas formas queramos o no el tema es muy duro, como lo es el momento en que uno de los chavales, al ver desde una ventana del hospital a otros chicos corriendo y jugando al futbol, le pregunta a otro: “¿Por qué nosotros estamos aquí y ellos ahí?”; el otro le contesta: “Nada, nosotros hemos tenido mala suerte”.
Los cuatro chavales lo hacen muy bien, pero el protagonista, Juan José Ballesta -”El Bola”- lo borda. Ballesta ya ha demostrado en varias ocasiones que, a pesar de su juventud, es un extraordinario actor; y esta vez no se ha quedado corto y lo ha vuelto a demostrar. Esperemos que su nuevo papel de papá en vida la real lo sepa desarrollar tan bien como los del cine.
En definitiva Mercero no defrauda en la cinta, y sigue en su línea de buen cineasta. Trabajar con niños nunca se le dió mal; de hecho todos recordamos el mítico “Verano azul” o la récord de audiencia “Farmacia de guardia”.
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